En la carrera por África, las metrópolis europeas destinaron tropas a la custodia o, simplemente, conquista de los territorios por ellas reivindicados.
En el caso del Imperio Alemán, un estado federal cuyos Länder contaban con sus propias fuerzas militares, y aún con estados mayores, el problema de enviar tropas terrestres a lejanos destinos en ultramar con las complicaciones que ello pudiese acarrear a nivel parlamentario o de opinión pública no era baladí.
Mas la solución provino del propio ordenamiento militar del Imperio. La Marina de Guerra era una fuerza que estaba bajo el control directo del Kaiser, esto es,era una Armada Imperial (Kaiserliche Marine) de tal suerte que sus miembros solamente estaban sujetos a la obediencia a la regia figura (ni siquiera el Reichstag pudo jamás imponer su criterio frente las prerrogativas imperiales).
Así pues, basándose en los escogidísimos Seebataillonen (Batallones de Infantería Naval), se crearon las Schutztruppen (Fuerzas de protección) coloniales a las que, posteriormente, se añadirían elementos nativos tales como los He He de Tanganyka.
Cuatro fueron las Schutztruppen destinadas a África, tantas como territorios alemanes en el continente:
Togo y Camerún
África Sudoccidental Alemana (Namibia)
África Oriental Alemana (Tanganyka)
Estas fuerzas harían frente a revueltas tan sangrientas como las de Hereros y Hotentotes en Namibia (1904-1907) o la del Maji-Maji en Tanganyka (1905-1907) y, posteriormente, a las tropas coloniales que los aliados despacharían para capturar aquellos territorios durante la Gran Guerra. Pero ésas son otras historias.
